Zoología fantástica

Bajo este nombre hemos agrupado esta serie de figuras en cerámica que constituyen un bestiario contemporáneo y una recopilación de animales y criaturas mitológicas monstruosas, quiméricos e irreales, creados por la insaciable curiosidad del artista que ha sentido siempre una fascinación, respeto o temor por todas las criaturas que, junto a él, poblaban la imaginación, la mitología y la religión.

Procedentes del mundo grecorromano, bizantino y persa, popularizados en la época medieval (siglo XII), los bestiarios mágicos, fantásticos o mitológicos, fueron también una colección de fábulas referentes a animales y monstruos reales o quiméricos con descripciones, e imágenes que se generaban por combinación de partes de animales diferentes, creando estampas, en ocasiones, atroces.

Aunque cualquier símbolo tiene dualidad de significados, incluso completamente opuestos, en los bestiarios se usaron ciertos animales con predilección para manifestar el bien y otros como formas del mal y del diablo. De esta forma nos encontramos con dragones, basiliscos, fauna escatológica, demoníaca, estrambótica, alucinante, grotesca y divertida. También los hay reales de signo positivo, como las aves (palomas, cigüeñas, águilas) y leones, bestiarios de signo negativo como serpientes, monos, liebres, cerdos, cabras y bestiarios fantásticos como grifos, dragones, arpías, sirenas.

Cada época ha formulado sus bestiarios. De los hechizos, la religión y la protociencia, estos magníficos documentos pasaron al plano de la ignorancia y la fantasía con el advenimiento de las Ciencias Naturales,  durante la Ilustración, misma que los relegó a los cuentos, leyendas y fábulas infantiles y que la ciencia ficción, literaria y cinematográfica,  han hecho suyos, los han  reinventado y han producido toda una nueva generación.

Con esta muestra en cerámica corroboramos la insaciable necesidad de crear esos monstruos que engendran la razón, la sensibilidad y el arte.

Ricardo Escobedo
Octubre 2011